Para muchas familias las vacaciones de Navidad son sinónimo de escapadas y viajes. Durante esta temporada del año las ciudades se transforman y muestran su lado más entrañable y colorido. Por eso, las navidades pueden ser una ocasión perfecta para volver a visitar tu ciudad favorita… ¡o descubrir nuevas!
Queremos proponerte cuatro destinos donde la Navidad se celebra de manera especial. Algunos poco conocidos y cerca de España, otros más exóticos. Pero todos ellos destacan por su encanto único y especial.
Riga (Letonia) – Una joya por descubrir
A orillas del pintoresco río Daugava, y con un casco antiguo Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, Riga es un destino europeo todavía por descubrir. En pleno centro de la ciudad, frente al portal de la catedral medieval, se celebra su conocido mercado de Navidad. Según se cuenta, Riga fue la primera ciudad en decorar un árbol de navidad. Los registros más antiguos fechan en 1476 la aparición del primer árbol, en la misma plaza donde hoy se celebra el mercado.
Mientras disfrutas de la arquitectura histórica de la ciudad, podrás pasear entre puestos donde se venden objetos navideños, pero también joyería, bufandas, velas con perfume, juguetes para niños… todo ello aderezado con la presencia de puestos donde tomar vino caliente con especias (el famoso Glögg) o té caliente acompañado de almendras tostadas.
Reikiavik (Islandia) – Un destino apasionante
Las auroras boreales hacen de Reikiavik un lugar único para pasar las navidades. En Nochebuena, las familias se reúnen para disfrutar de un banquete con perdiz nival, cordero ahumado, reno y otros alimentos poco comunes en España.
La capital más al norte del mundo se engalana como pocas para celebrar la Navidad con iluminación callejera. Además, te puedes cruzar con grupos de jóvenes que cantan por las calles y dejan regalos en las casas, siguiendo la tradición islandesa de los «Trece hombrecillos de Navidad».
Carcassonne (Francia) – Un paraíso medieval
Durante esta festividad, Carcassonne puede convertirse en el centro de operaciones perfecto para una escapada al sur de Francia. La zona del país cátaro ofrece en invierno multitud de pueblos con encanto acompañados de pequeños mercados de navidad.
En Carcassone, espléndida ciudad medieval, encontrarás múltiples actividades y mercados en las diferentes plazas, todo ello en un escenario magníficamente conservado. El mercado principal se encuentra junto a una pista de hielo, y cuenta con puestos de comida con vin chaud (vino caliente), crêpes y otras delicias de la cocina francesa.
Viena (Austria) – Un ambiente inigualable
Pocas cosas hay más estimulantes que pasear a finales de diciembre por una ciudad nevada. Así suele encontrarse el visitante de Viena y su centro monumental. La experiencia no tiene rival. La ciudad se ilumina con varios mercados navideños, destacando el mercado del Ayuntamiento (Rathaus), hecho con cabañas de madera y envuelto en un aire mágico de cantos, iluminación y adornos.
El centro de la ciudad también se engalana para recibir a la Navidad. Plazas como Karl Platz o la del palacio de Hofburg se pueblan con enormes ferias ambulantes, repletas de toda clase de productos navideños y alimentos típicos. ¡Frohe Weihnachten!